Las mentiras son como máscaras en una representación en la que como
una gran obra de teatro donde cada quien
es un tal vez un quizás, circunstancial del elemento inspirado. Todo depende de cada acción en el momento del ahora.
Todas son ilusiones, y de todas se aprende,
que la curiosidad, el experimentar, el equivocarse, o, el acertar es lo que hace que avancemos,
pero para la verdad última, es imposible tal engaño en el que uno se aferra ( pregunta le a tu ego cuanto tiempo necesita).
Tan sólo ocurre una experiencia en la que el perdón al ser desde el corazón, nada tiene que ver con las razones de ningún elemento en acción que se presenta. Está completa mente diseñado para que te des cuenta en que lugar te encuentras en ese instante. Sencillo si no dejas al ego manipular la situación . La ligereza del sentimiento se vuelve como una pluma ligera, que corre veloz mente latiendo en pura conciencia. Grande es un corazón en la que la gratitud se vuelve una oración diaria. Así que cada vez que algo aparentemente externo a mi altera mi sistema de pensamiento, suelto la absurda idea de la razón y esto se vuelve cada vez más suave y más dichoso, apariencias locas que muestran que alguien tiene el poder sobre ti.
Nadie tiene tanto poder, a no ser que así lo permitas.
Me siento agradecida ...bienvenida experiencia en tu bendita acción para mi despertar.
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